Escupiendo sangre porque es lo que tienes
lo que te quedas, lo mas verdadero.
Desgarrarte como un útero pero sin traer vida
arder sin llamas
aullar sin alcanzar a ver la luna.
Y volver y retornar y oscurecer
cada rincón que habitas,
asustar a cada corazón que rozas
condenada a amar por todos los siglos
y de todas las maneras.
Morirte, hacer como si no doliera
prostituir tu sonrisa en cada esquina
y perdonar hasta que vuelva el alba;
Al que te hizo madre
Al que te robo la vida
Al que abuso de ti
En una noche de cortinas
Al que no supo besarte
Al que te rompió
A todos, ellos,
Los protAgonistas de tu historia.
«Que poco divertida eres cielo!
Girate un poco,
enséñame tu perfil bueno,
saca pecho y respira hondo»
– y yo pienso-
Y luego siento, levemente.
Me voy, me atrevo a tomar las riendas.